Coty
Tormo, la cantaora: emotiva, sensible, dominada por sus pasiones, da cuenta del
amor romántico, de los desengaños, de la opresión doméstica del matrimonio y de
su capacidad de resilencia.
Héctor
Tortosa, guitarrista: de raíz estandarizadamente machista, su carga masculina
proveedora lo lleva a proponerse en un trabajo “de riesgo” frente a dos mujeres
que lo increpan y disputan su protagonismo.
Pate
Palero, militante feminista, con pretenciones intelectuales y una autoexigencia
frente al afecto que le impide encontrarse con sus sentimientos.
Pero
además, está Toribio, cuya esencia instintiva nos hará recordar que siempre
existen más de dos opciones.
Y
que el amor, la sensualidad y el afecto no tienen fronteras.